sábado, 18 de diciembre de 2010

Bienvenidos al “Chinoparking”

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Hace tiempo que queríamos publicar algo sobre el famoso chino de Pza de España, pero ha tenido que ser nuestra redactora jefe en Carpetana, Miren Lucia, la que al final se animase a dedicarle unas líneas a este, ejem, restaurante. Al parecer es tan frecuente verla por allí que los empleados la dicen "¡Milen, tenemos tallalines flitos!" al pasar por delante. Aquí os dejamos con la entrada que todo amante de la comida china estaba esperando: El Chinoparking.

"Cosas de la vida, mientras los restaurantes japoneses se hacen de oro cobrando a millón bolitas de arroz con pescado crudo (benditas sean, que no se me “malentienda”), los chinos se han quedado con el más o menos merecido sambenito de “cutretes”. Y la verdad es que, al menos aquí, la fama no está tan mal traída. Aún así, seguimos picando. Por un más que módico precio nos tragamos el típico arroz tres delicias "con toltilla” y los rollitos de primavera recién descongelados de siempre, convencidos de estar zampando viandas del mismísimo Pekín. Pero, ¿alguien ha visto a un solo chino de China (a parte de la familia del restaurante) comiendo en alguno? Yo sí, el ya conocidísimo “Chino de Plaza de España” (el verdadero nombre, si lo tiene, no lo he sabido nunca).



Personalmente ya había perdido la fe, resignándome al triste pollo agridulce (¿de dónde sale ese color fucsia-rojete, por cierto?) y al licor de lagarto de La Gran Muralla de turno, cuando por casualidad alguien me habló del “Chinoparking”. Un sitio en el que jamás de los jamases se te ocurriría entrar si no es porque un colega de otro colega te lo ha recomendado, entre otras cosas porque está bajo tierra, literalmente.



La primera instrucción es “no dejarse engañar por la apariencias” porque, las cosas como son, el sitio no puede tener peor pinta. Está en un aparcamiento (el de Plaza de España), rodeado de una pequeña China Town (agencia de viajes, tienda de ropa y tienda de comida, ¡todos chinos!), es pequeño (siempre hay cola, aunque corre que se las pela), no tiene baño y si no te lo han recomendado, es raro raro raro que te pares ni siquiera a ver si regalan algo (por la cola digo).



Aún así, y sin dudarlo, es con diferencia el mejor chino en el que he estado en Madrid. Eso sí, si por “mejor” entendemos calidad de la comida (tradicional de allí), rapidez e ir a lo que se va, a comer bien y barato (baratísimo) sin que te den gato por liebre (aunque esto en un chino nunca se sabe J). Son tan efectivos que mientras estás en la cola te dan la carta para que vayas pensando lo que quieres y, según acabas de comer, te recogen el plato, “de palique a casa”. También está la opción de pedirlo para llevar. Si hace buen tiempo, te lo comes en el césped de Plaza de España y si hace malo, a casita. Puedes llamar para que te lo vayan preparando (a domicilio no te lo llevan, ohhhhh!!).



¿Que qué pedir? Muy recomendables las empanadillas al vapor (“empanadilla asado” en el espa-chino de la carta), el arroz y los tallarines fritos, el pollo con verduras… No está demás consultar si tienen algo fuera del menú (como la ternera con verduras) o incluso preguntar qué están comiendo en las mesas de al lado.



Y nada más, ahí os dejo esta sugerencia. ¡A disfrutarla!



Fdo. Otra fan del Nometimes"